Nissan Skyline GT-R: historia y evolución del deportivo japonés

El nombre Nissan Skyline GT-R es bien conocido a nivel mundial y lleva muchos años levantando pasiones. Si preguntas por una serie de coches deportivos de origen japonés, una gran parte del público te contestará con esta familia, que tiene una historia muy dilatada e interesante. Han pasado más de seis décadas desde sus inicios, así que vamos a hacer un repaso sobre su evolución con los distintos modelos y generaciones que se han sucedido hasta la fecha.

 

El Skyline nació en 1957 de la mano de Prince

Aunque siempre hemos relacionado el Skyline con Nissan, lo cierto es que su primera aparición fue bajo el paraguas de otra marca. En 1957 apareció el Prince Skyline, un sedán de la firma japonesa Prince Motor Company que buscaba posicionarse en el segmento del lujo. Salieron varias carrocerías del modelo e incluso hubo una versión de competición: el GT Skyline. En 1966, Prince se fusionó con Nissan y comenzó un nuevo capítulo en la historia, pues claramente éste modelo fue de los que se mantuvo en la gama.

 

Primera generación de Nissan Skyline en 1969

No tuvo que pasar mucho tiempo para que apareciese la primera generación del Nissan Skyline, ya fuera de Prince y con una personalidad diferente. Siguió siendo un sedán, aunque su motor de seis cilindros aumentó su potencia hasta los 160 CV, bastante impresionante para la fecha. De hecho, este modelo también fue el primero en tener una versión GT-R que tomaba algunas características del ejemplar de competición y alcanzaba esa cifra. Estuvo disponible con la carrocería de cuatro puertas y también como coupé más adelante, comenzando su legado.

 

Nissan Skyline C110

Después de ese «Hakosuka», apodo del primer Skyline 2000 GT-R, llegó una nueva generación. El Nissan Skyline C110 no pasará a la historia como el mejor ni como el más conocido. Salió en 1973 en plena crisis del petróleo, lo que hizo que no pudiera triunfar como se merecía. El «Kenmari» también tuvo una versión GT-R de lo más interesante, aunque solamente se venderían 197 unidades de esta generación antes de que se retirase de la producción. Y fue un parón largo, pues pasaría más de una década hasta que se recuperasen las siglas deportivas.

 

R30 Skyline

En la década de los 80, el Nissan Skyline no destacó demasiado. Fue un periodo de transición en el que aparecería la generación R30. En realidad, se trataba de un vehículo muy versátil que estaba disponible en hasta cuatro carrocerías para sumar un total de 26 versiones diferentes en los años que estuvo en el mercado. Entre ellas no estaría la esperada GT-R, así que terminaría pasando un poco más desapercibido que el resto.

 R31 Skyline

Lo mismo pasaría con el Nissan Skyline R31, lanzado en 1986 con un diseño más cuadrado que las anteriores generaciones. No tuvo versión GT-R, pero es reconocido en la actualidad por ser el primero en montar el famoso motor «Red Top», ese bloque FJ20 con cubierta roja que sería el predecesor de la mecánica más popular de la marca japonesa.

 

R32 Skyline GT-R

Con la crisis dejada atrás, en 1989 vio la luz el Nissan Skyline GT-R R32, la generación que devolvió el esplendor a este longevo modelo. Ahora sí que se trataba de un GT-R puro, que montaba el motor de seis cilindros en línea y 2.6 litros RB26DETT, que pasaría a la historia por su desempeño y versatilidad. El modelo de tracción total llegaba hasta los 280 CV y pronto se ganó un hueco en la cultura JDM de Estados Unidos con preparaciones de lo más estrafalarias. También hubo una versión de competición que ganó todas las carreras que disputó (29 seguidas) para comenzar a forjar la leyenda.